Mare de Déu del Roser

Esta imagen de la Virgen del Rosario, obra de Luisa Granero, no es la primera que hay en la pared exterior del Palau de la Virreina. Dentro de las obras de restauración y mejora que se hicieron en edificios públicos los meses previos al Congreso Eucarístico, se había puesto ya una en la pared medianera de la derecha, es decir, la contraria de donde es ahora la imagen . Según explica Adolf Florensa en una publicación municipal de 1953, "en una de las medianeras se ha colocada una hornacina conteniendo la imagen de la Virgen del Rosario, que las floristas de Nuestra Rambla cuidan de tener siempre adornada". Una fotografía del mismo libro muestra que la hornacina a que se refiere es la de la derecha mirando la fachada y que debajo había como una rejilla-celosía donde se ponían las flores.

En una reforma de mediados de los sesenta, la hornacina se trasladó a la pared de enfrente y la imagen antigua, por alguna razón que no hemos podido averiguar, desapareció. En 1967 el Ayuntamiento encargó a Enric Monjo la realización de una nueva imagen; pero, como pagaban muy poco, Monje traspasó el encargo a Luisa Granero. Esta utilizó su hijo Enrique como modelo para el niño Jesús y una fotografía de su hermana muerta hacía poco para realizar el rostro de la virgen. Hizo el modelo en barro que un especialista se encargó de ejecutar en piedra. La inauguración de la imagen fue el 1 de octubre de 1967, fecha festiva en aquella época en España porque se celebraba la "Exaltación del Caudillo en la Jefatura del Estado", con un homenaje floral. Esta imagen ha sido siempre muy vinculada a las floristas de la Rambla.

La pared medianera de la derecha, donde había habido otra imagen de la Virgen del Rosario, fue restaurada dentro la campaña "Barcelona, ​​ponte guapa", y se puso una celosía para que se emparrado una Buganvilla de homenaje a Mary Santpere. Una placa lo recuerda. Las dos cosas (restauración de la pared y placa) se inauguró el 5 de enero de 1993.