Fuente del Pla de la Boqueria

No deja de ser curioso que se pusieran fuentes junto a las puertas de entrada a la ciudad por la Rambla precisamente cuando esta muralla había dejado de tener sentido y se iba eliminando poco a poco. Al igual que habían colocado una en la Puerta Ferrissa el 1680, en colocaron otra en la puerta contigua, la de la Boquería, inaugurada el 24 de diciembre de 1830. Esta última, de estilo neoclásico y bajo un arcosolio, se empotró en la pared del antiguo convento de capuchinos.

Encima de tres grifos hay un gran escudo de Barcelona con los símbolos de Hércules, el basto y la piel de león. El yelmo situado sobre el escudo ha sido decapitado en más de una ocasión por los vándalos, la última fue en 2002.

Según la leyenda, existía una cierta prevención a la hora de ir a buscar agua a esta fuente, porque en una ocasión se encontró el dedo cortado de un niño metido dentro de uno de los inyectores. Pero su emplazamiento estratégico, en uno de los puntos de encuentro más frecuentados por los barceloneses -el Plan del Hueso o de la Boqueria, base de operaciones de vendedores ambulantes y espectáculos de calle-, se imponía a su mala fama.