Monasterio de Santa Anna

El antiguo monasterio de Santa Ana fue fundado a mediados del siglo XII por los canónigos del Santo Sepulcro

La iglesia de Santa Ana, que se encuentra en un espacio cerrado y ajardinado, detrás de la plaza de Cataluña, era en origen de planta de cruz griega con ábside rectangular.

Los muros son gruesos, con los sillares bien cortados y unas ventanas alargadas y delgadas. Hacia el 1300 se alargó la nave, que se cubrió con bóveda ojival, mientras que el transepto y el ábside conservaron la vuelta originaria de cañón apuntado. En este momento también se abrió el portal gótico, situado en el extremo del brazo sur del crucero. El cimborrio, comenzado en el siglo XV y que quedó inacabado, fue rehecho después de 1936 con ladrillo.

A la izquierda del portal se encuentra la antigua capilla de Todos los Santos, del siglo XIII, que hoy es presidida por una Piedad del pintor Pere Pruna. Era famosa la capilla de los Perdones, del siglo XIV, que contenía un interesante grupo escultórico del Santo Entierro, obra del siglo XV, y ante el que se ganaban en determinados días las mismas indulgencias que el Santo Sepulcro de Jerusalén. Hasta el incendio de 1936, la iglesia guardaba parte de un retablo de Bartolomé Bermejo.

A poniente de la iglesia está el claustro gótico. La galería inferior, de arcos ojivales sostenidos por columnas cuadrilobuladas, y la sala capitular anexa (hoy capilla bautismal), cubierta con bóveda octogonal, fueron hechos construir por el prior Mateo Fernández a partir de 1450. En el siglo XVI se construyó la galería superior del claustro, con aberturas de arco rebajado, que ha sido rehecha modernamente.

  • Gòtic
  • C. de Santa Anna, 29

  • Metro L1L3CATALUNYA

logo footer


Zona de Miembros